EL ÁRBOL DE LOS DESEOS

Una vez un hombre muy pobre se perdió en un bosque y la casualidad le llevó a recostarse en el tronco de un árbol mágico, de esos que conceden deseos inmediatos. Tan pronto deseas algo, el deseo se cumple. 

Como el pobre hombre llevaba varios días sin comer,  tenía hambre y dijo:

"¡Tengo tanta hambre! ¡Ojalá pudiera tener algo de comida!".

E inmediatamente apareció la comida de la nada simplemente flotando en el aire, una comida deliciosa. Como estaba realmente hambriento, ni se fijó en que esa comida estaba allí mágicamente, se  la comió y estaba deliciosa. Una vez que su hambre estuvo saciada, miro a su alrededor pensando: "¡Qué sed! ¡Ojalá tuviera algo para beber!" Y de modo que de inmediato apareció un vino estupendo.

Mientras bebía  tranquilamente, el hombre reparó en lo raro que era todo aquello:

"¿Qué está pasando?Con la mala suerte que tengo, seguro que aparecen fantasmas para atormentarme"

Y aparecieron fantasmas feroces, horribles, nauseabundos, burlones. 

Nuestro pobre hombre comenzó a temblar y pensó:

"¡Seguro que me matan!"

Y lo mataron.